domingo, 14 de diciembre de 2014

Carta a los Relles Magos

Queridos Relles Magos:
 Hos escribo mi carta porque beo que los demás niños an empezado ya y porque he sido muy bueno y porque hace mucho tiempo que no os escrivo y porque boy a pedir algunas cosas y quiero que hos de tiempo a traérmelas. Pero no hos asustéis, porque no váis a tener que traer un remolque ni nada de eso, no boy a pediros bultos. Además, sé que tenéis trabajo con los ñiños y yo ya soy mayor (he cumplido ya 40), así que podéis dejarme para los últimos, no me importa. Lo que sí me gustaría es que me trajiérais todo lo que hos pido, o al menos que lo hintentéis. Mis deseos no van en orden ni son muchos y son estos:
1) Me gustaría seguir teniendo la misma familia que tengo, aunque si viene alguien más mejor.
2) Me gustaría seguir teniendo los mismos amigos que tengo, y si vienen más mejor también.
3) Me gustaría que la jente fuese más tolerante y amable, que se respetaran todos y se comprendieran el uno al otro y a los animales y a la naturaleza, que no todos somos iguales y tenemos las mismas cosas y ideas, pero debemos bibir en paz.

Mi rey faborito el negro
4) Me gustaría seguir teniendo salud para hacer muchas cosas que hacen felices a las personas para que luego me den besitos y abrazos que me gustan mucho. Porque como dijo un gran amigo mío: "Llo solo pido salud, que lo demás lo pongo lló".
5) Esto que hos boy a pedir es más difícil y si no podéis traérmelo no pasa nada. Me gustaría tener un trabajo para tener muchos billetes de cinco euros, pero si no puede ser no pasa nada, ya me imbentaré algo.
6) Me gustaría que la jente que sale por la tele diga siempre la berdad, y así no veré cabrearse a nadie ni a mi padre decirles hijode y lo que sigue. Porque dicen una cosa y luego no la hacen, y seguro que Dios los está biendo y los va a castigar. Pero bueno, ellos sabrán.
7) Me gustaría que el Madrid gane la liga y la chanpions y el Barsa no.
8) Me gustaría que si boy a veros a la cabalgata, no me tiréis los caramelos muy fuerte y tiréis más peluches. Y si lla estamos un rato de pie, que no se ponga la jente que viene la última y se pongan delante.
9) Y para terminar, me gustaría que os llege mi carta y no hagáis como con los currículums que los tiráis cuando hay muchos. Hasta el año que biene.

sábado, 4 de octubre de 2014

No tienen corazón

Vamos a ver... ¿que se creen estos preferentistas? ¿que pueden estar todos los días protestando y gritando como animales o etarras en la puerta de mi Banco? ¿que pueden increparme cada vez que voy a trabajar? Porque si no les he devuelto el dinero (ese que dicen que es suyo), es porque no lo tengo, por eso tuve que pedir la tarjeta "black" y pasar vergüenza. ¿Qué es lo que quieren? ¿Que mi mujer vaya con un abrigo de Zara y que deje a mi hija sin su descapotable? ¿Fumo Winston y bebo Larios? ¿¡Hasta dónde vamos a llegar!? ¿Quieren que dimita y nos vayamos a vivir a la húmeda casa de la playa para siempre? ¡¡Mátenme ya y acabamos con todo!!.
 Esto no es Bambi señora, esta es la vida real. Además, todas las tarjetas implicadas en el presunto fraude se habían emitido a nombre de la propia caja y, según la auditoría interna que ha sacado a la luz las presuntas irregularidades, se justificaron como "gastos de órganos de gobierno" para las que utilizáramos los consejeros y como "tratamiento administrativo circular". Todo legal señora. Si fuera delito estaríamos todos los directivos en la cárcel. Lo que tienen que hacer estos viejos es irse a su casa a ver la tele o salir a andar por el parque ahora que ya no hace tanta calor. Es muy fácil ingresar un dinero y querer sacarlo cuando uno quiera saltándose el contrato por el forro. Los contratos y los plazos hay que cumplirlos. Lo que pasa es que estos viejos no planifican bien su futuro. Han estado toda la vida haciendo no sé qué y ahora dicen que necesitan el dinero para medicinas. ¡Pues se les ve bastante bien y con fuerzas para gritarme cada mañana en la oreja! ¡A ver si va a resultar que lo que quieren es llevarse dinero así porque así!

Los insensibles
 Esto tiene que acabar, no puedo seguir así, no me concentro en mi trabajo, me da ansiedad. La policía sacarse la mano del culo y protegernos de estos vándalos que no saben lo que es la democracia. Ya no teníamos suficiente con los de Podemos que vienen a dejarnos vagabundos en los cajeros como para que le insulten a uno por hacer su trabajo. Y no me quiero calentar con el tema porque si me caliento... ¿Qué hacen los hijos de estos viejos en vez de estar trabajando? Pues fumar porros y vivir cómodamente tocándose los huevos hasta que llega el día que se mueren sus padres y heredan la casa. Lo que tienen que hacer es venir a llevárselos y evitar así que se hagan daño y no hagan más el ridículo. ¡Que uno se levanta de lunes a viernes para trabajar de ocho a dos y levantar el país, no para dar por culo! Ya está bien de tanta libertad y de hacer cada uno lo que le dé la gana. Con viejos como éstos España se va a la mierda en dos días. No tienen comprensión ni corazón, son insensibles y no miran más allá que no sea el dinero. ¡Parece que estén obsesionados! Porque si yo tengo dinero es porque me lo he ganado, estudiando y sacándome una carrera. Nadie me ha dado nada. Me gustaría a mí que se pusieran por un día en mi lugar, madrugando para meterte en un atasco ya de buena mañana, con un montón de datos en la cabeza, vistiendo un traje todo el día hasta en verano, sentado toda la mañana en una silla que acabas con la espalda destrozá,  poniendo buena cara a los clientes, con estrés, almorzando en un bar que no te gusta, y encima señalado por la calle. Esto no es vida. Menos mal que por lo menos los viernes me tomo unos cubatas con los compañeros, que si no vaya lucha iba a llevar. A todos esos que gritan en la calle los ponía yo a hacer cuentas como un loco. Me cago en la puta...

martes, 30 de septiembre de 2014

Esta tarde va a llover en el coño de alguna

 Toda la tarde en casa y justo cuando salgo un momento a por tabaco empiezo a notar unas gotas gordas en la cabeza que me han hecho darme cuenta de que mi sedoso cabello fino y dorado necesita un corte. Pero un poco más adentro, atravesando la verruga, mi mente se ha ido tres días atrás en una de las jornadas más caóticas de los últimos meses climatológicamente hablando. Lo del otro día fue escandaloso para esta ciudad (llueve tres días al año), pues en algunos puntos del municipio se registraron hasta cien litros por metro cuadrado en menos de una hora y media, quintuplicando las peores previsiones de los expertos. Sin embargo no fue escandaloso sólo por romper quinielas meteorológicas, que llueva en septiembre justo cuando las fiestas de cartagineses y romanos se celebran es todo un clásico. Fue un escándalo infraestructural. ¿Y qué coño es eso? Pues creo que es la primera vez que uso este término, pero supongo que es más fino que decir que Cartagena cuando llueve es una mierda. Vale que al fundarse en el año 227 A. C. puede que tenga alguna gotera, pero lo de la otra tarde no fue normal. Veamos por qué Cartagena es una mierda cuando llueve. Y para verlo, lo voy a explicar en un único apartado :
Un único apartado) Tenemos a un holograma 3D por concejal del Área de Urbanismo e Infraestructuras en el Ayuntamiento que cobra como si fuera humano
Imagen del holograma 3D, el hospital no cabía
El Sr D Francisco Espejo, anunció una semana antes de que cayera la tromba que "la ciudad estaba sobradamente preparada para las lluvias", por eso, pese a las advertencias desde la Agencia Estatal de Meteorología que avisaba de las fuertes precipitaciones en la vertiente mediterránea, Espejo sólo seleccionó el mantenimiento y limpieza del 55% de imbornales, unos 5.500 de los 10.000 existentes. A la mañana siguiente del desastre, el holograma 3D no limpió la ciudad porque empezaba el fin de semana, y muy poco faltó para repetirse el mismo mogollón al día siguiente y justo ayer. Hoy martes, mi barrio por ejemplo sigue lleno de lodo y escombros en sus calles, pero claro, mi barrio es castizo, que supongo que quiere decir viejo, marrano y lleno de negros, moros y gitanos.
Los barrios más afectados por las lluvias torrenciales fueron el de Santa Lucía, Los Dolores, los accesos a la ciudad por Alfonso XIII, el puerto y Alfonso XII, Paseo del Muelle, zonas del Ensanche, Centro Comercial Cenit, parte de la autovía CT-33 con entrada al Hospital Santa Lucía... ¡Un momento! ¿He dicho Hospital Santa Lucía? ¿Que se inundó el Hospital Santa Lucía? ¿El mismo colosal Hospital Santa Lucía inaugurado el 23F de hace tres años por la entonces Princesa Letizia? ¿El mismo maravilloso Hospital Santa Lucía que quiere desbancar al otro hospital de la ciudad con sus inmejorables instalaciones dotadas con 14 quirófanos, casi 700 camas, 8 paritorios, 115 locales de consulta, 33 puestos de hospital de día médico y sus 26 puestos de hospital de día quirúrgico? ¿El mismo Hospital Santa Lucía con 18 equipos de hemodiálisis, 2 gammacámaras y otros 2 aceleradores de partículas? ¿El mismo Hospital Santa Lucía con un gabinete de braquiterapia y otro de medicina nuclear? No puede ser, no puede inundarse algo que está sobre terrenos "no inundables", algo que ha costado tantos millones y tantos años de trabajo, esto es una broma... jejejejjeej ¿dónde está la cámara oculta?.
 Adjunto enlace para informaros más sobre este icono de la sanidad en la localidad: http://www.murciasalud.es/seccion.php?idsec=4614
Quizá nuestro querido holograma, al ser tan joven como yo, no curró el viernes por la tarde porque estaba en el campamento bebiendo cubatas, jugando a la Play o haciendo running por Tentegorra... ¡que no todo va a ser fiesta pijo!. Y el finde aunque se te inunde la ciudad entera es para descansar, todo el mundo lo sabe. Además, ¿quién iba a pensar que le caería agua a los romanos?. Ah! pa' mañana dan lluvia.

sábado, 16 de agosto de 2014

Ellos

Ellos utilizan máquinas ultramodernas que les facilitan el trabajo; yo me entreno cada día para mantenerme en pie. Ellos tienen mujeres hermosas que
pasan el día maquillándose y comprando; yo tengo una escudera vikinga capaz de derrotar a un regimiento. Ellos tienen varios títulos y yo ninguno; pero pese a los golpes aún no he besado la lona. Ellos hacen cruceros; yo no paro de achicar agua de mi barca. Ellos pisotean a la gente; yo me quedo mirando a una hormiguita portando una cáscara de pipa. Ellos viven para esculpir su cuerpo; yo vivo para sonreir. Ellos beben hasta desmayarse; yo bebo para acompañar a un amigo. Ellos no valoran lo que tienen; yo le doy valor a lo que importa. Ellos cagan tartas de trufa; yo me tiro peos para que los huelan. Ellos se peinan; yo no tengo peine. Ellos tienen una familia en Facebook; yo la saco a pasear. Ellos derrochan a cascoporro; a mí me regaló un boli la del Banco. Ellos usan gafas de sol caras; yo tengo que ir a graduarme la vista un año de éstos. Ellos tienen hijos maleducados; mi hija les atenderá en su consulta de psicología el día de mañana. Ellos tienen más megas; yo tengo una rayita de cobertura. Ellos escuchan las novedades de la radio; yo toco el piano con mi sobrino. Ellos te mandan un corazón al Whatsapp; yo te lo entrego en persona. Ellos se ríen solos; yo descojono con una mueca. Ellos comen marisco; yo champiñones. Ellos disfrutan del aire acondicionado; el mío lleva telarañas. Ellos hicieron un viaje de bodas al Caribe; mi mujer hizo tortillas de patata, magra con tomate y ensaladilla. Ellos hacen ruido; yo me quedo observándoles. Ellos van a la moda; yo me recorto la ropa. Ellos no votan porque les da pereza; yo he sido el primer presidente con una camiseta de King Diamond. Ellos llevan tatuajes caros; yo me los hago. Ellos van a la playa; yo vivo en la selva. Ellos ven "A todo gas"; yo uso butano. Ellos saltan en la cama; yo la amo. Ellos cantan en la ducha; yo en todas partes. Ellos viven con complejos; yo me los paso por los huevos. Ellos huelen a perfume; yo a gato. Ellos tienen vacaciones; yo subsisto eternamente en ellas. Ellos actúan; yo ya lo hice. Ellos son mejores que yo; pero no los envidio para nada. Me gusta ser yo.

viernes, 30 de mayo de 2014

Pablito clavó un clavito en tu huevito

 Es el chico de moda, el salvador de las víctimas, el coletas enrollao, el líder de los indignados, el canijo listo, el que sin inmutarse le toca los huevos a Marhuenda, Inda o el que se ponga. ¿Quién no lo conoce ya? A estas alturas es lo mejor que nos podía pasar. Está recibiendo palos por decir cosas como que va a luchar contra la corrupción, los banqueros, el paro, contra los deshaucios, los recortes en sanidad y educación... En definitiva contra lo que casi todos creemos que es injusto y por supuesto contra la casta. Y qué es la casta? La casta política son todos aquellos que nos metieron las tijeras y nos sacaron las tripas para hacer morcillas y longaniza y montar una barbacoa. Y luego, una vez "fuera" del poder político y dentro de una gran empresa, vuelven a rajarnos para hacer panceta y jamón cocido. Así de simple. Ahora la derecha tiene miedo. Miedo de que no puedan inflar más sus putas cuentas corrientes. El capitalismo salvaje puede tener sus días contados. Me hacen gracia los peperos traicionados por un programa que no se cumplió y caminan como pollos sin cabeza, desorientados sin saber qué decir, insultando a los demás sin ton ni son, rabiosos porque el coletas es más simpático y expone sensaciones que duelen a los de la parte de arriba de la brecha. Me hacen gracia porque si el coletas triunfara, se iban a beneficiar (de su por ahora croquis) dentro de un año y medio sin rechistar. O iban a renunciar por ser contrarios a sus ideales? Que no me hagan reír que me va a entrar hipo. Hemos estado esperando este momento durante mucho tiempo. Estábamos deseando que viniera a rescatarnos un héroe, y ahora que lo tenemos, no deberíamos dejar que se estrellara.
 Hay que apoyarlo y volar junto a él, por encima de los edificios, de los bancos, de los chalets, de los coches oficiales, de las medio calvas engominadas y de sus putas madres. Y volando volando, podríamos llegar hasta Suiza, o hasta las Islas Caimán o Belize para recuperar todo el dinero que tanta falta nos hace ahora. Con todo ese dinero podríamos arreglar los problemas en los que nos ha metido la casta y vivir como nos merecemos. Y al regresar a nuestro país, pasar por Gibraltar, arrancar el peñón y llevárnoslo volando muy muy alto, hasta la estratosfera, para después arrojarlo con violencia contra el Valle de los Caídos y destruirlo todo dejando un enorme cráter. Y para terminar, le diría a nuestro héroe que juntara a todos los culpables de la crisis y los pusiera en fila como si fueran un trenecito, con el puño metido en el culo del de delante al ritmo de El Consorcio y su "Chacachá del Tren". Sería genial, verdad?

jueves, 24 de abril de 2014

Ladillas on fire!

 Esta mañana en las noticias he escuchado una nueva perla que me ha hecho sentarme frente al ordenador después de varias semanas y arrancar esta historia corta sin moraleja. Hay personajes que sueltan lo que piensan sin pensar, porque están plenamente convencidos de que no sufrirán consecuencias, porque aquí nunca les pasa nada a estos personajillos. Y si les pasara algo, luego como mucho con un "lo siento" o con un "soy una sexagenaria" todo se arregla. La mayoría ni tiene que recurrir al comodín del tito Alberto. Hasta un rey puede salir airoso con uno de esos términos. Eso sí, tú no le cuentes historias al jefe si llegas tarde o a un agente de tráfico en temporada estival que te mete un paquete que te cagas. Por eso no somos iguales ante la ley. ¿Qué guay no? Somos habitantes de un país singular, surrealista, de chiste, maravilloso, como el de Alicia. No hay día que pase y te enteres de alguna noticia tronchante, porque lo bueno de vivir en un país manejado por inútiles es que conoces a cachondos nuevos todos los días, que con sus perlas abren debates en bares y calles que ayudan a entretenernos hasta que llegue el ansiado Mundial de fútbol . ¿Se llevará Del Bosque a Dani Carvajal? ¿Jugará con Cesc como falso nueve? A lo que voy. Lo malo sin embargo de vivir en un país manejado por inútiles es que todos los palos nos los vamos a llevar los mismos, pero no nos importa porque somos españoles, toros bravos con unos cojones para aguantar lo que nos echen.
Ladillas en zona genital
 El especímen que hemos conocido hoy muchos españoles se llama Mónica de Oriol, presidenta del Círculo de Empresarios. En un desayuno ha planteado que la indemnización por despido se acerque a los 18 días por año en una segunda reforma laboral. ¿Qué guay no? También que sólo se aplique el salario mínimo (la fortuna de 645,30 euros) al que esté cualificado y se le baje a los que "no sirven para nada" explicó. Estoy seguro de que le encantaría que cobrásemos 30 euros mensuales, como en Bangladesh. Por cierto, se cumple un año del derrumbe del Rana Plaza que supuso 1.138 muertos. La planta textil sigue utilizando a esclavos para manufacturar productos que posteriormente vende Benetton, Mango o Carreffour. ¿Qué guay no? Pero quiero centrarme en las declaraciones de Mónica de esta mañana que más me han afectado. A los parados que cobran la prestación les ha dicho prácticamente "parásitos que no buscan trabajo". ¿Qué guay no? Si un parásito es una persona que vive de otra, se podría considerar también a Mónica como una parásita teniendo en cuenta que se casó con Luis Guillermo Perinat y Escrivá de Romaní, III Marqués de Perinat, conde de Casal? O ha llegado a ser presidenta zurciendo calcetines en el Rana Plaza? Y si es una parásita, de qué tipo? una pulga? un hongo? un piojo? una alga roja? un parásito intestinal? una ameba? o tal vez una ladilla en los huevos? Pero no te preocupes Mónica, no está sola, yo me solidarizo contigo. Porque si parásito es buscarse la vida sin ayuda del Gobierno, me enorgullezco también de ser ladilla. Nos vemos en los huevos de alguno! Ladillas on fire!

domingo, 23 de febrero de 2014

La mierda con ojos

 Ayer por la tarde millones de personas sufrieron un trauma de proporciones bíblicas. Vivieron para lo que ellos fue un apocalipsis: WhatsApp dejó de funcionar durante unas horas. No os podéis ni imaginar lo que sucedió a continuación. Al principio hubo confusión y perplejidad a niveles normales, pero a medida que pasaban los minutos empezaron a producirse pequeños episodios de histeria colectiva que provocaron estrés, angustia, neurosis, depresión, ansiedad, brotes de epilepsia y desmayos. Pero eso no fue lo peor. A la hora de suceder el fallo en la aplicación, ya se hablaba de un terrible suicidio en masa cerca del Condado de no sé dónde y que los cadáveres yacían con el móvil en la mano, la cara pintada de amarillo y una lágrima cayendo...


De madrugada, el insomnio dió paso a violentos disturbios que se propagaron rápidamente por todas las ciudades del mundo. Salí de casa alertado por las campanadas de la iglesia armado con la goma del butano (no tengo armas en casa y me han dicho que un gomazo en el muslo o la esparda va muy bien) y nada más abrir la puerta pude asistir a una verdadera escena dantesca: pillaje, incendios en tiendas de telefonía móvil, gente que saltaba desde el balcón agobiada por una sensación de aburrimiento terrible, tiroteos, violaciones, canibalismo, necrofagia, necrofilia, exorcismos en plena calle, cabezas que explotaban... Bueno, cabezas que explotaban no, pero todo lo demás sí. Todo era un caos. Cientos de personas desorientadas sin saber qué hacer ni a dónde ir, empujándose, intentando no enloquecer. Una señora me agarró del brazo y le solté un gomazo en la cara que la tiré patrás. Se levantó y me señaló algo. Entre la multitud vi a una niña llorando que agarraba un osito de peluche y estaba a punto de ser atropellada por un tanque. Salí corriendo, me abalancé sobre ella, dimos cuatro volteretas y pude rescatarla con vida. Al osito lo aplastaron. Decidí volver a casa sin contarle a mi familia lo que había presenciado pero ya era tarde, los de Telecinco se me habían adelantado y estaban dando un programa especial. De repente, se cortó la emisión, sonó el himno nacional y salió en la pantalla el escudo real. Al instante, apareció SM El Rey. Vestía un guatiné de Capitán General, con semblante serio, de pie, sin muletas, con polvo blanco en la nariz y acompañado por Coto Matamoros, unos generales, coroneles, almirantes, sargentos o yo que sé, ya ni me acuerdo cuando hice la mili. El país se paralizó para escucharle. El ruido de la calle desapareció. Justo cuando se preparaba para empezar a hablar, le explotó su cabeza.

domingo, 26 de enero de 2014

Eddie, las ecuaciones y la segueta

 Esta mañana como estaba lloviendo, he cogido el coche y he llevado a mi hija y a sus dos amigas al instituto para que no se mojaran. Pobrecicas. Van tan divinas con sus mechas californianas, sus chaqueticas, sus mallas de estampado tribal y sus carpetas decoradas con pegatinas de cantantes adolescentes con los pelos que parece que se acaban de levantar de la siesta o de románticos vampiros sensibleros con menos sangre que Enjuto Mojamuto que... Ainss qué recuerdos. Al verlas me entró la nostalgia y empecé a acordarme de cuando iba al colegio con mis primeras greñas, la carpeta forrada con una página del Metal Hammer donde se veía el "The headless children" de W.A.S.P., la chaqueta vaquera heredada con el parche bordado de Scorpions, los pantalones vaqueros láser heredados, los libros de texto heredados... en fin, antes entonces todo se heredaba, hasta los calcetines. Cuando veo a los chicos de ahora pienso: -Joder! qué horteras que éramos! Eran finales de los 80.
 Mis primeros años de E.G.B. los hice en Elche y poco después al mudarnos a Cartagena en el Carthago, el colegio del barrio. Allí cursé 3º y 4º con buenas notas y una anécdota que mi madre cuenta cuando habla de mi niñez. Yo tengo un vago y borroso recuerdo de ello: Faltaban cinco minutos para salir porque habíamos subido las sillas a la mesa y me entraron unas ganas tremendas de mear. Le pedí permiso para ir al aseo a la profesora pero no me dejó. Entonces, convencí a unos cuantos compañeros para que me hicieron un corrillo y lo hice en una esquina. Supongo que al día siguiente hablaron con mis padres y eso. Fué una excepción, porque por lo general siempre he sido un buen chico, educado y responsable. A partir de 5º fui al que puedo atreverme a decir era el mejor colegio de la región, el situado en el Valle de Escombreras. Era inmenso, con lujosas instalaciones, era espectacular. Tenía grandes jardines, varias canchas de baloncesto, de hockey, de futbito, gimnasio, comedor, salón de actos, laboratorio... hasta una capilla! Era más grande que el barrio donde vivía! Por desgracia ya no existe, al ampliar la refinería demolieron los edificios y el poblado entero. Sólo quedan algunas fotos en internet de lo que una vez fué. Allí pasé mi mejor etapa estudiantil. No por lo académico, pues empezaba a flojear en las notas, pero aprendí mucho. Curioso verdad? Jugué en el equipo de fútbol del poblado, con una camiseta como la del Ajax. Llevaba un dorsal de cuero cosido con el número cuatro. Era el lateral derecho suplente. Iba cada semana dos o tres días a entrenar y salí una vez en un partido diez minutos en toda la temporada. Como no llevaba gafas, no me pasaban mucho. Creo que toqué el balón dos veces! Me gustaba mucho el inglés y la plástica, y de hecho es con lo que me he quedado a día de hoy. Y llegó la debacle. A todos nos puede pasar que empiezan a aburrirnos los profes, las matemáticas, la química o la gimnasia, pero si superas esa fase en la que todo te parece un rollo, triunfarás o por lo menos acabarás los estudios y así podrás optar a la universidad. Yo me incliné por el mundo del circo, concretamente por los payasos. Cometí el error de pasar el día haciendo reir en clase y no atender lo suficiente. Me aburría Amparo con sus ecuaciones y sus fórmulas, Marina con su historia y hasta Maruxa con su segueta en pretecnología. Eran buenos maestros, pero yo no estaba por la labor. Prefería hacer el tonto delante de las chicas, dibujar decenas de Eddies de Iron Maiden en mis libros o en cada mesa en la que me sentaba, porno o gore en libros ajenos, logos de bandas heavies en los asientos del autobús...
 Mi vida empezó a girar en torno al heavy y al dibujo. Hubo un momento en el que donde miraras, había algún boceto mío por ahí. Un día me llevaron incluso a representar al colegio en un concurso de dibujo y eso que no era un enchufado! Los enchufados (hijos de trabajadores de la refinería) que no tenían ni puta idea, siempre eran los elegidos para representar al colegio, y eso me dió alas para pensar que me valoraron por mi talento. No fui uno de los más populares, pero a todos caí bien y con casi todos me llevé bien. Tengo un buen recuerdo de esa época. Me atasqué en 8º y al final me echaron de una patada como en el instituto, cuando en mi primer año de administrativo hice una mierda de curso. Ahí ya empezaba a pasar de todo, entraba y salía cuando me apetecía, me dejé crecer el vello por todas partes, empecé a aullar como un lobo loco... pero esa es otra historia.

martes, 21 de enero de 2014

Es fácil salir del rebaño si sabes cómo

  Mi fama de paranoico que cree que un grupo de poderosos está siempre maquinando para controlar todos nuestros movimientos no es nueva. El que me conoce un poco sabe que pienso que las cosas no son porquesí. Sostengo que todo es por algo, que las cosas no son tan sencillas, porque pudiendo complicarlas y hacerlas más despiadadas no tiene sentido imaginar que vivimos en un mundo guay, donde la gente es guay y hasta yo soy guay. Nos consideramos unos tíos listos, que entendemos de todo, que no caemos en trampas y que no nos la van a pegar así como así. Ingenuos de mierda... ¿Qué creéis? Cuando nosotros vamos ellos ya han vuelto! Todo está manipulado para que el rebaño, o sea nosotros, sigamos comiendo su hierba. Porque como se te ocurra salirte del rebaño para probar la hierba que has visto con una pinta que te cagas al otro lado del camino, ya tienes al perro que de un ladrido te pone en vereda. ¡Pero si el perro es mi colega y lo conozco hace tiempo! -dices- Y es verdad, pero el perro está ahí para eso, para que no te descarríes. Es como cuando vas acompañado de tu mujer a la discoteca y el portero te saluda y hasta te abre la puerta, sucede todo lo contrario cuando vas solo o con un colega, no pasas ni de coña. Solo es muy difícil luchar y conseguir cosas, siempre será mejor contar como mínimo con uno más, como Guevara & Castro o Andy & Lucas.
  Yendo solo por la vida lo único que te puede pasar es que te absorba una secta. Así como suena. No todas tienen una cruz encima de la puerta para que te cosques, las hay de todo tipo. Otro día me extenderé sobre el mundo de las sectas que no es moco de pavo. Me quiero centrar en una de las más peligrosas: "Android". Antes no existía toda esa mierda de sistemas operativos, antes jugábamos al "churrová", al "calimbre", a "la mosca" o a "la una la mula" sin necesidad de ningún aparato ni nada, sólo tenías que tener cuerpo y aguantar lo que te echaran. Eran otros tiempos, éramos más paletos, éramos más felices. Las aplicaciones y los juegos para móvil de frutitas, bolitas, granjitas y sobre todo las apps que te permiten chatear, hablar como Coelho y colgar fotos falsas e insulsas son las que te engancharán de verdad y te agilipollarán de tal modo que te anularán como persona si es que alguna vez lo fuiste. ¡Sí, sí! te cegarán y para tí no existirá nada más que pasar las horas agrupando bolitas de colores de tres en tres para reventarlas. Es una pena, porque en el mundo están sucediendo cosas interesantísimas y te las estás perdiendo por culpa de la puta secta androide. Pero... ¿cómo puedes evitarlo? Facilísimo. Cuando te empiece a salir lana de la espalda sabrás que es la señal para parar y estampar el móvil. Porque como no pares, vas a ingresar en el rebaño y vas a tener una vida de mierda, te van a salir cuernos, y vas a estar pegado a un aparato de mierda que te ha costado un huevo y el otro te lo está chafando y del que no podrás soltarte si no cumples un contrato o pagas una cláusula. Eso es justo lo que quieren. ¿No prefieres disfrutar de lo que mola de verdad como beber cerveza con los amigos 3D, follar o salir al monte con tu perro? Puede que ya sea tarde, que tu móvil le haya ganado el pulso a tu cerebro, pero mientras saques tiempo para esas cosas, tu cerebro crecerá y podrá pensar, exponer ideas e incluso coordinarse con tu boca para hablar con alguien. Sorprendente!

jueves, 9 de enero de 2014

Rodeado de putos amarillos

 Hoy me estrechan un poco más el cerco. Estaba tranquilamente echando unos currículums por e-mail cuando llaman al timbre. Es entonces cuando empieza el ritual: La perra sale disparada ladrando hacia la puerta y yo le gruño intentando que deje de alborotar. Voy hasta la puerta procurando no hacer ruido para que el llamador no sepa si en la casa hay alguien o no, pues la idea es echar un vistazo por la mirilla antes de abrir. Porque yo soy de los que si veo que el llamador es algún personaje que no me interesa, no abro. La mirilla no acompaña, pero distingo a un tipo alto, moreno y con gafas: el vecino de las patas largas. El vecino de las patas largas es un señor de unos cincuenta y pocos, que en verano lleva bañador y dos tablas de surf en lugar de chanclas. Vive dos calles más abajo y guarda su coche justo delante de mi casa. Me lo cruzo casi a diario andando o embutido en su Clio azul, pero nunca había articulado palabra alguna con él, siempre nos hacemos un tímido saludo levantando las cejas. Abro la puerta (atrapando a la perra con el pie contra la pared para que no se escape) y me encuentro con que ya se había dado la vuelta en dirección a su cochera:
La rayica pintadica. Falta la otra.
-Dime! -le berreo-
-Hola, es que... que... que...
 Madre mía! es tartamudo y apenas tengo tiempo para ir a por mi hija al instituto. Por suerte, y gracias a la habilidad que tengo para intuir y anticiparme a lo que me dicen, conseguimos entendernos rápidamente. Voy a resumir la conversación para no parecer burlón. Resulta que el Ayuntamiento le ha obligado a poner una chapa de vado y a pintar el asfalto porque al meter el coche pisa la acera... o yo que coño sé, y me pedía permiso para pintar en mi lado de la calle. Yo le he dicho que mientras no me pintara la fachada de amarillo me daba igual. Me ha repetido varias veces lo mismo con tartajeo incluído. Se me ha hecho eterno! Soy un poco cabrón a veces, pero no tanto como para reirme en su cara ni en la de nadie. Además, aprendí a reirme por dentro, una técnica que vi hacer en Crónicas Marcianas a Jose, el novio militar que tuvo el polifacético artista-curandero-tertuliano-minero-gilipollas Paco Porras y que casi ahoga el Cárdenas en aquel "crucero" por el Mediterráneo atado a una lancha en FBI. Estuve partiéndome el culo con esa escena un tiempo, y es que me encantan las frikadas jajajajaja. Bueno, ahora me he asomado y estaba el tío pintando una de las rayitas con su mujer y dos jubilados de la zona que daban órdenes sin parar. Me cuenta que va a ser una pintada disuasoria, que no me va a denunciar si aparco. Pero después de un episodio airado con su hijo y lo poco amigos que somos... ¿quién se arriesga? No me fío ni un pelo. En fin, que entre el vado de los pijos de al lado, éste nuevo, el del viejo revolucionario de la esquina y los del pirata de la otra manzana, me han arrodeao y me tocará dejar el coche lejos de la puerta o en el solar de enfrente para que los simpáticos perritos (con permiso de sus simpáticos dueños) se meen en mis ruedas. Así funciona la contemporaneidad, hace que todo ésto se parezca cada vez más a una ciudad.